Archives for : poesía

Una sobremesa diferente

A mirar con malos ojos

yo me resisto,

me da fuerzas desde dentro

mi amado Cristo.

 

Mi mujer y yo vivimos para ti, Señor,

ya sabes lo que te quiero decir,

que tú nos trates con  la misma delicadeza

que te tratamos a ti.

 

Hagas lo que hagas y digas lo que digas

siempre me parecerá bien,

¿por qué?

por lo que has hecho por nosotros,

por lo que nos has enseñado,

por lo que nos has amado,

por tu vida que nos has dado.

 

Tú quieres que sea feliz,

mi mujer se ha mareao,

como quieres que yo esté alegre

si me tienes preocupado.

 

No se por cuanto tiempo

mi vida va a ser en poesía,

quizá más pronto que tarde,

volveré a mi letanía.

 

Ahora quisiera dormir

no te vas del pensamiento,

yo se que me quieres mucho

pero no me robes el tiempo.

 

Ya he cerrado los ojos,

mi gente sigue despierta,

aunque solo sea media hora,

déjame dormir la siesta.

 

Sin embargo mi refugio,

no creo que yo lo abandone,

es difícil que otro ofrezca

lo que ofreces tú en tus dones.

 

Es difícil que te hable,

si no te hablo en poesía,

me acompañas hasta en sueños

desde que amanece el día.

 

Mi mujer me ha despertao,

a poco de conciliar el sueño,

me pongo de nuevo a escribirte,

solo tú eres mi dueño.

 

Me preparo con el boli,

y con papel en la mano,

pa decirte que te quiero

tanto o más que a mis hermanos.

 

Me llevaría un disgusto,

y toda una decepción,

que tú no me quisieras tanto,

como a ti te quiero yo.

 

No me importa que la gente,

diga que lo mío es locura,

cuando digo que te quiero

mucho más que tos los curas.

 

Con alguna de estas cosas

me entra la risa,

cuando paseo por el puerto

siento la brisa.

 

Estoy mirando la piedra,

la piedra de tu sepulcro,

y recuerdo lo que hicieron

a un hombre que era justo.

 

En ella pinté una cruz

para acordarme,

la vida que te quitaron

por mucho amarme.

 

Con tristeza hoy lo dejo

hasta mañana,

tú sabes lo que preparo

con muchas ganas.

 

Hay momentos de tristeza,

y momentos de alegría,

si no fuera por tu aliento,

difícil, pasar el día.